Guardia Civil le tomó declaración a Antonio Sánchez, el empresario encargado de perforar el pozo donde cayó Julen. En el marco del proceso judicial en el que se lo investiga por “homicidio imprudente”, el hombre buscó desligarse de toda responsabilidad al apelar a su experiencia profesional.

Una vez excavado el agujero de 110 metros de longitud, el pocero aseguró haber cubierto la entrada con una piedra. De acuerdo con su testimonio, el hombre lleva “cuarenta años haciendo el mismo trabajo”, y jamás cometió un sólo error. “Mi trabajo lo hago siempre bien”, afirmó Sánchez ante las autoridades, y sostuvo que utilizará el mismo alegato cuando tenga que declarar en sede judicial.

Según el empresario, a pesar de que él mismo fue el encargado de “taponar” la boca del pozo, su labor fue posteriormente modificada por unos movimientos de tierra en la zona. Pese a la tranquilidad manifestada en su discurso, cuando se le preguntó si contaba con un abogado, el hombre contestó que tiene “de todo”. Con respecto al trágico desenlace al que arribó la búsqueda de Julen, Sánchez dijo que tanto él como su esposa se sienten desolados.

El hombre espera recibir en los próximos días una carta certificada de parte de la justicia en la que se lo citará a prestar declaración indagatoria. Tanto él como el dueño del terreno en donde se hizo el pozo son investigados para determinar su grado de culpabilidad en la muerte del nene.

Como parte de las declaraciones tomadas por los oficiales de Guardia Civil, también fueron entrevistados los familiares de Julen. Su padre, que se encontraba a cargo del menor al momento del hecho, explicó: “Estaba echando unas ramas al fuego y vi cómo mi hijo corría por una zanja hacia la esquina donde estaba el agujero. No alcancé a agarrarlo” .

Por su parte, su madre afirmó que "podía oírse su llanto dentro del pozo". Sin embargo, aseguró que, de un momento a otro, éste se dejó de escuchar. “Cuando dejé de orile, empecé a gritar desesperada”, dijo la mujer.

Julen cayó por el agujero cuando jugaba con otro niño en la finca de un familiar. Su búsqueda tuvo en vilo al mundo entero durante 12 días. Según los rescatistas, existía la posibilidad de encontrarlo con vida como consecuencia de la formación de una “bolsa de aire” dentro del pozo. Lamentablemente, el pequeño fue encontrado muerto el pasado 25 de enero. La autopsia del cuerpo determinó que su fallecimiento se produjo minutos después de la caída.

Fuente: TN